miércoles, 21 de enero de 2009

BERRIEL Y SORIA


Los diccionarios de Berriel y Soria


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Tiene razón Domingo Berriel cuando dice que no se sintió presionado por Santana Cazorla. El consejero de Política Territorial recurrió a ayer a su diccionario para definir el verbo presionar, y declaró a los periodistas que “presionar es obligar a alguien a hacer algo que no quiere, y conseguirlo”. Después de leer la conversación telefónica entre el empresario y el consejero del gobierno canario que grabó la policía, uno llega a la conclusión de que Berriel no se tomaba peticiones de favor de Cazorla como uno obligación, como algo que no quería hacer. En los diez folios de la conversación recogida en el informe policial se puede ver que Berriel no entendía los deseos del empresario como una presión, sino como la petición de un favor que le hace un amigo que se confiesa “desesperao” y él intenta ayudarle, y le aconseja las cosas que puede hacer y las que no.


“Si eso no es tráfico de influencias habría que quitar el delito del Código Penal”