jueves, 22 de enero de 2009

"VILLA MEONA II": RIVERO NO ESTÁ EN CRISIS


El soplo


ÉL NO ESTÁ EN CRISIS. Los canarios estamos atravesando un gran bache económico, una crisis que parece no tener fin. Pero eso nos ocurre a los canarios de a pie, a los sufridos contribuyentes, no a los altos cargos elegidos por el pueblo. Hablamos del presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, que se ha gastado 120.000 euros en reformar cinco baños de su residencia oficial en Las Palmas -en Tenerife tiene otra- y en pintarla y mejorar algún despacho.

ASÍ ES. Sí, Rivero puede disfrutar de esta residencia en Ciudad Jardín, pero de momento pernocta en el hotel Santa Catalina con cargo al erario público, faltaría más. En Tenerife, la sede oficial de Presidencia del Gobierno cuenta con habitaciones en su parte alta, por si alguien quiere dormir allí -Román Rodríguez lo hacía porque tenía un hijo recién nacido- y al margen los canarios pagamos de nuestros bolsillos la manutención del Palacio de Vistabella, en Santa Cruz de Tenerife, donde se pueden hospedar invitados de excepción, y donde el anterior jefe del Ejecutivo, Adán Martín, fijó su residencia mientras gobernó.


Suelos, cocina y cableado elevaron a 285.000 euros los arreglos en la residencia oficial del presidente


La factura aumentó en 165.000 euros, frente a los 120.000 inicialmente previstos. Todas las contrataciones se hicieron por adjudicación directa y sin publicidad.


Cortinas color paulino


Imagino a doña Mena decidiendo el color: “Paulino, querido, es que las cortinas en tonos claro ya no te sientan, te dan un tono muy cenizo”, y a Rivero consintiendo con la testa: “Lo que tú digas Ángela”. Y ella: “Si todo es en tonos gris destacas lo justo que te conviene… ya verás que bien nos queda”.


F.O.S.


Desde que se publicara ayer en este su periódico el asunto de los cinco baños, cinco, que Paulino Rivero ha ordenado alicatar por un módico precio en la sede de Presidencia de este lado del canal de Agaete, se ha originado una inexplicable chanza entre el personal no adscrito al Ejecutivo