Actriz consumada aspira por mucho que lo niegue a recoger los restos de la nave coalicionera en las próximas elecciones. Y Rivero convaleciente. ¿Se recuperará políticamente hablando? Rivero ya es un cadáver político al que su incansable afán por salir en todas las fotos en vez de gobernar, le ha salido caro y no le ha permitido coger frutos de ello ni ante su partido que creía controlado.
Asistiremos a todo un espectáculo lacrimógeno y falsamente practicante de
chachismo. Ya ha comenzado la función.